La acequia de Paradela es una obra notable que conduce el agua del río Varoso para abastecer el regadío de Paradela, a 3 km de distancia. Al lado de la acequia, un sendero proporciona un paseo que recuerda en todo a las famosas acequias de la isla de Madeira. Esta tiene su inicio en un codo del río que rodea un promontorio donde se edificó, en el siglo XII, el Monasterio de São Cristóvão de Lafões, de la orden de Cister. El convento ha sido restaurado en el siglo XVIII y, en 2010, ha sido clasificado como Monumento de Interés Publico. El acueducto de las Aguas Reales, que abastecía de agua el monasterio, es testigo del ingenio de los monjes de la orden. En sus laderas un magnífico bosque se desarrolla con especies como el alcornoque, el madroño, el laurel, el avellano, el árbol de Santa María, el sello de Salomón, los pajarillos y el androsemo, revelando una clara afinidad con la laurisilva de da isla de Madeira. En su follaje se pueden contemplar, con sus soberbios colores, las raras mariposas tornasolada chica y ninfa de los arroyos.