De tablero horizontal, apoyado en arcos, el puente de Cabaços, sobre el río Paiva, ha sido construido en albañilería de granito y presenta un perfil medieval. Actualmente apenas se observa parte del puente, fruto de la degradación a lo largo de los años, pues ha sido destruido por una inundación en los años 60 del siglo XX. El puente de Cabaços marca un escenario romántico y misterioso en este punto del río Paiva.
El río Paiva se caracteriza por sus excelentes condiciones para la biodiversidad, presentando diversas especies de fauna y flora raras y protegidas. Se pueden destacar las bellas libélulas macromia y esmeralda moteada o el raro mejillón de río, que aquí hallan las condiciones ideales para su desarrollo. Por estos parajes pasan también la discreta salamandra rabilarga o el sapo corredor. A flora aquí presente es rica, siendo posible observar una gran diversidad de especies como la centaurea o el endémico acicate de olor português.
En el río Paiva, en Reriz, hay un pozo que en tiempo era propiedad de los abades de Reriz donde estos pescaban abundantes truchas y otros peces. En este lugar solamente se podía pescar con el permiso de los demás habitantes. También era en este tramo del Paiva que los abades se bañaban en paños menores, lejos de las miradas del pueblo.